
donde perdí las palabras,…donde dejé de recordarme,…y fui aquel extraño que nunca se conoció,
oculto en la piel opaca de la soledad,…carente de la diferencia que me hizo ser diferente
.gritando motivos que quizá nunca existieron,…y se hizo tarde incluso para ser tarde,….y el alma quiso estar muerto.
y se encerró en la distancia del silencio,….y el dolor fue tan profundo que hasta dejo de dolerme.
y el corazón se arranco del cuerpo,….y el cuerpo quiso marcharse,…hasta que el tiempo me rescató de la nada.
y el alma quiso vivir,…y la vida me invitó al baile de los detalles,…y aprendí a sentir de nuevo.
y conseguí despedirme del abismo del adiós,...y renací engendrado en la esperanza,
de habitarme nuevamente,….de volver a conocerme,…hoy persigo el horizonte,…para nunca más perderlo